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Enfriador para vino, torneado a mano por un artesano alfarero, mediante un proceso donde se resalta su resultado dejando el barro poroso por fuera y lacado por dentro.
Es una pieza que se moja, absorbe el agua gracias a la superficie porosa, se mete en el congelador para posteriormente enfriar el vino, el cual nunca se ve mezclado con el agua ya que contacta con la superficie lacada, que lo protege. Muy resistente.
El barro mantiene durante mucho tiempo la temperatura, siendo un conservador del frío de manera artesanal.
Y además este enfriador está torneado a mano, siendo cada pieza única y exclusiva. Es una pieza artesana de alfarería que vestirá tu mesa, y a la que le sacarás mucho partido. También es un gran regalo, para esa persona que aprecia los buenos vinos, seguro te lo agradecerá.
El mecanismo es de lo más sencillo. La primera vez tienes que sumergir el enfriador en agua, para que se hidrate por completo. Gracias a su superficie porosa se realiza muy rápidamente. Una vez que está hidratado se guarda en el congelador, el agua se congela y adhiere al lacado interior conservando el frio durante mayor tiempo.
El vino frío se mantiene fío durante el tiempo que dure la comida o la cena, solo tienes que decantarlo en su interior.
| Peso | 800 g |
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